martes, 25 de agosto de 2015

Conclusiones iniciales sobre el Madrid de Benítez

Con la pretemporada finalizada y tras el tropiezo en Gijón, atribuible a la falta de rodaje propia de estas fechas, es el momento de comenzar a sacar conclusiones y esbozar lo que parece que serán las características del proyecto de Rafa Benítez al frente del banquillo blanco.

La primera y más evidente senación es el aumento de solidez defensiva, el equipo ha encajado tan sólo dos goles en pretemporada (uno de ellos de penalti) y ha sido capaz de mantener la puerta a 0 en su estreno liguero. Las causas de esta mejora en el sistema defensivo son varias: Empezando por una mejora en la portería, en la que tanto Keylor (que parte como titular) como Casilla se han desempeñado con seguridad, demostrando que ambos tienen nivel suficiente para desempeñarse con solvencia en la posición. La pizarra también tiene buena culpa de esto, puesto que la defensa ha adelantado líneas, reduciendo los espacios entre la zaga y los mediocentros, uno de los puntos más conflictivos de la temporada pasada, favoreciendo también una presión más alta que permite recuperar el balón con más facilidad y encerrar al rival; también se detecta más colaboración por parte de algunos de los jugadores de arriba a la hora de hacer ayudas. Esto último influye también en la mejora de los laterales, que el año pasado no estuvieron a la altura defensivamente siendo verdaderas autopistas durante varios tramos de la temporada, tanto en la derecha, con la competencia de un buen Danilo y Carvajal (que ha mejorado a este último) como en la izquierda con un Marcelo más centrado y atacando de forma más lógica (a pesar de su mal partido ante el Sporting).

El hecho de haber juntado líneas beneficiará mucho al centro del campo, donde parece que la pareja Modric-Kroos parte con ventaja, aunque el alemán sigue de bajón tras su mal final de temporada pasada. Si de algo ha servido la pretemporada es para comprobar que uno de los principales problemas en la medular era la falta de recambios de garantías, Illarra ha terminado de demostrar que no vale para este equipo y a Lucas Silva aún le falta bastante, por lo que ambos saldrán (el brasileño presumiblemente cedido). Para paliar esto se han buscado, y bien, recambios de garantías, con el músculo de Casemiro y la fluidez de Kovacic, que apunta a ser una buena apuesta que tendrá minutos cubriendo bajas y facilitando descansos, o incluso haciéndose un hueco ante puntuales momentos de baja forma.

La mayoría de síntomas preocupantes se aprecian en la zona ofensiva del campo. La idea de Benítez de buscar movilidad permanente arriba no esta siendo todo lo bien ejecutada que debería por parte de los atacantes blancos. El experimento de Bale en la mediapunta, especialmente ante equipos cerrados, no cuaja ya que el galés necesita espacios para brillar, y se desaprovechan sus grandes virtudes (que las tiene, por mucho que digan lo contrario) obligándole a recibir de espaldas y soltarla de primeras. Además se pierde desborde ya que Cristiano cada vez es menos capaz de superar a los defensas en duelos individuales y la propia inercia de Bale al moverse para abrir los espacios que se demandan le lleva a juntarse en la izquierda con el propio Cristiano, que junto con Marcelo puede generar un atasco en ese lado. Si a esto unimos la falta de desborde por fuera que tienen tanto James como, en menor medida, Isco hace que los equipos que cierren los pasillos interiores de forma eficaz puedan cortocircuitar nuestro ataque con facilidad.

Además del juego, la famosa "ThePegadaMierder" que diría +Maketo Lari sigue siendo un mal de este equipo, la baja de Benzema por lesión ha permitido a Jesé gozar de minutos como 9, donde ha demostrado que el juego de ariete puro no es lo suyo, por lo que podría ser necesario buscar otro tipo de delantero que ofrezca variantes arriba y pueda cubrir bajas.

Estas son las principales conclusiones que se pueden ver al inicio de este nuevo proyecto madridista. A grandes rasgos las sensaciones que deja el equipo son positivas, a pesar del bajón inicial por el mal resultado ante el Sporting,con especial mención a la solidez ganada. De momento sólo queda dar tiempo y dejar trabajar al entrenador y al grupo para ver si asimilan las ideas de Benítez que, como todas, sobre el papel son buenas.

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